martes, 9 de septiembre de 2014

¿Cómo eres?

Reían. Todos reían a su alrededor, pero las risas nunca escapaban de sus labios. Lo único que brotaba de ella eran lágrimas, lágrimas al ver y al saber que esas risas las provocaba ella. A pesar de ser una sombra, de querer ser ignorada, para que las risas cesaran, no lo conseguía, sino que las aumentaba. 
Pasaron de las risas a las burlas y de ahí a las mentiras. Luego llegó el desprecio y con él un dolor intenso proveniente de empujones y arrebatos de histeria que los demás profesaban contra ella. 
"¿Por qué?" -se preguntaba, si nunca le había hecho nada a nadie. 
Y la respuesta apareció en su mente, se posó como un pájaro lo hace sobre una rama: ligero, suave y dulce: "porque no soy como ellos, porque jamás le haría esto a otra persona, porque nunca me reiría de nadie, ni me burlaría de él, ni mentiría sobre él; tampoco le despreciaría, ni mucho menos le empujaría ni descargaría mi histeria en esa persona". 

Y...¿cómo eres?

STOP BULLYING!